Uno no vive, sobrevive, que cada paso que damos, cada segundo que pasa es un segundo, un paso que estamos dando al futuro, dejando el presente convirtiéndolo en pasado y sobreviviendo cada posibilidad del destino, eligiendo uno u otro camino sin siquiera pensarlo, sin siquiera tomarle el peso de lo que un simple paso puede implicar, y como el mundo funciona en perfecta coalición, cada destino, cada vida funciona en un perfecto balance, todos los puntos están unidos y ninguno de nosotros sabe cuándo, cómo y porqué se romperán tampoco sabemos si algún día se romperán o no, quizá el equilibrio se rompa. Ahora.
"Aveces la destrucción es necesaria para que pueda haber creación"
Nuestra vida no es ni siquiera un pestañeo en el tiempo del Universo.